No será inocente.
No mientras yo viva.
Siempre estarán sus silbidos grotescos
Para recordarlo.
Siempre un dolor aguijonándome,
Atravesando mis vértebras,
Subiendo hasta el brote de los pelos,
Emergiendo de un pasado remoto y oscuro.
No será inocente.
No hasta que de su cuerpo no exista más
Que sus paupérrimos huesos
Dentro de una húmeda fosa.
Allí estaré para salarlos,
(No sea cosa de que vuelva de la ultratumba.)

2 comments:
Me encanta. Contundente los dos primeros versos.
Gracias Gio, me costó mucho escribirlo...o me dolió mucho expulsarlo de adentro...ja.
Publicar un comentario